Quien no se compró un día una exquisita mermelada para un no menos exquisito queso y dejó el bote en la nevera y cuando fue a abrirlo de nuevo para volver a maridar otro queso se encontró una sorpresas.Seguro que las sorpresas te gustan, pero no estas.
Es muy fácil evitar que se nos ponga mala una mermelada cuando ya hemos abierto el bote.
Solo tenemos que hacer un sencillo gesto, ponerlo boca abajo.Un pequeño y sencillo truco que hará que nuestras mermelada olvidadas en la nevera estén igual de frescas y ricas como si acabáramos de abrir el bote.
Para conservar en prefecto estado la mermelada, ponerla boca abajo |
Recuerda, BOCA ABAJO !!!!!
Un dulce besico.
Manuela